domingo, 31 de julio de 2011

KATE MORTON ESCRITORA AUSSIE









De Australia nos vino Kate Morton esta primavera a estampar la firma en un libro suyo publicado este año en español, en la Feria del Libro de Madrid.

Nació en Berri en 1976 y vive en Brisbane. Su editorial española cuenta que lleva vendidos mas de dos millones y medio de ejemplares en el mundo.

Lola Huete la entrevistó y escribió un articulo sobre ella en el País Semanal e inmediatamente me interesé por su obra.

Me había llamado la atención El Jardín Olvidado por la coincidencia en el título con un libro publicado en 1911 y considerado hoy un clásico de la literatura infantil, El Jardín Secreto de Frances Hodgson Burnett. Es probable que en España el público conozca mejor la película del mismo nombre

Hice uso de mi tableta y compré en Amazon Kindle The Forgotten Garden.

No es que sea un plagio pero el argumento guarda algunos parecidos con la obra mencionada y podía en sus entrevistas o en su página Web reconocer la influencia de este libro.

En el clásico una niña viaja sola de la India a Inglaterra. Sus padres han muerto y ella va a cobijarse en la casa de un tío donde encuentra un ambiente lúgubre, un primo confinado a su habitación por una enfermedad autoinducida, casi imaginaria. Descubre un jardín secreto, olvidado y con ayuda del jardinero lo hace renacer, como renace la salud de su primo gracias al jardín y a su influencia. Los puntos que tienen en común no pueden ser coincidencia.


En el libro de Morton una niña es abandonada en un barco que parte de Inglaterra a Australia con una única maleta blanca por compañera. Tiene cuatro años. La recoge un empleado del puerto australiano y la hace pasar por hija suya. Años despues le confiesa que no es su hija y ella se pasa el resto de sus días buscando su verdadera identidad.
A los noventa años a las puertas de la muerte, le confía a su nieta el cierre de esa búsqueda y la nieta parte a Inglaterra, encuentra una casa y un jardín con un secreto donde la abuela se refugiaba de niña.

Indagando, desentierra una historia familiar un poco farragosa y rebuscada y a su vez encuentra la felicidad que un tragico accidente le había arrrebatado al llevarse su pequeña familia.
La madeja de la historia que va deshilvanando mientras habla con personajes que conocieron los hechos 80 años antes (Eso si, su abuela que visito Inglaterra 25 años atrás no pudo hacer hablar a estas personas que parlotearon años despues) narra las circunstancias de otra una niña que llega a esa casa en Inglaterra en el año 1900 y encuentra a otra niña enferma, con una enfermedad mas imaginaria que real. Esta niña es su prima y personaje central de la tragedia que luego se desencadena.

Los personajes son un poco planos. Les falta hondura. Termina por importarte un bledo lo que les pasa y creo que es por culpa del ritmo narrativo que no termina de cuajar.

Le daré otra oportunidad leyendo otra de sus obras La Casa de Riverton o Las Horas Distantes.